Para la mayoría de los niños una gaseosa y una golosina dulce son una pequeña fracción de azúcar y no es suficiente para el consumo diario, sin embargo un estudio ha demostrado que los niños no deben consumir más de seis cucharaditas de azúcar al día.
El estudio realizado por la Escuela de Medicina de la Universidad de Atlanta, indicó que para los niños consumir más de esta cantidad al día resultaría muy peligroso para los más pequeños de la casa, lo que significa que esta cantidad es es equivalente a una pequeña barra de chocolate y menos de una lata de refresco.
El Instituto Nacional de la Salud recomienda actualmente que los niños deben tener no más de tres cucharaditas al día (12 g) de cuatro a ocho años y que desde los nueves años en adelante su ingesta no debe exceder de ocho cucharaditas.
La profesora de Pediatría, la doctora Miriam Vos, de la Escuela de Medicina de la Universidad de Atlanta, dijo: “Los niños que comen alimentos cargados de azúcares añadidos tienden a comer menos alimentos saludables, como frutas, verduras, granos integrales y productos lácteos bajos en grasa que son buenos para su salud cardíaca.Ha habido una falta de claridad y consenso en cuanto a la cantidad de azúcar añadido se considera seguro para los niños, por lo que los azúcares siguen siendo un ingrediente comúnmente añadido en los alimentos y bebidas, y el consumo total de los niños sigue siendo alta el niño americano típico consume aproximadamente el triple de la recomendada cantidad de azúcares añadidos”.
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